Niños y niñas con asma ¿Pueden tener un perro? [18-8-15]

Niños y niñas con asma ¿Pueden tener un perro?

En nuestro país no se tienen cifras exactas, pero se calcula que el 10 por ciento de la población infantil tiene asma, padecimiento que a muchos niños les impide llevar una vida como la de cualquier otro pequeño.

Esta enfermedad crónica del sistema respiratorio caracterizada por la inflamación de las vías respiratorias, se presenta por lo general en respuesta a uno o más factores desencadenantes como la exposición a un medio ambiente frío, húmedo o alergénico; incluso se dice que por el esfuerzo durante el ejercicio es más frecuente en edades infantiles.

El hecho es que en esta etapa de la vida los niños se encuentran experimentando el mundo, echan a volar su imaginación e incluso es el mejor momento para orientarlos y guiarlos para ser responsables con sus propias cosas dentro de su hogar.

Mucho se habla de las actividades que esta enfermedad les impide realizar a los niños como correr, jugar con muñecos de peluche, practicar algún deporte y hasta tener mascotas; la realidad es que es un mito, ya que ellos pueden hacer su vida normal incluso hacer ejercicio como natación, deporte que más les ayuda a equilibrar su enfermedad.

Médicos especialistas como la Dra. Nelly Ramírez, alergóloga, presidenta de la Asociación Mexicana de Asmáticos, A. C. y asesora de Royal Canin, señala que cuando en una familia se encuentra un niño con problemas de asma, no deben alarmarse si se tiene o desea tener un perro y/o gato, porque hay antígenos que pueden considerarse dentro del plan del tratamiento del pequeño, para que pueda convivir sin problema con su mascota.

En el caso de tener un perrito, es importante primero antes de deshacerse de él, realizar pruebas a su hijo para conocer si es alérgico o no a esa mascota. Si resulta que su pequeño es alérgico, usted debe decidir si conservar o no a la mascota, pero esta decisión no siempre es la mejor solución ni hace feliz a los integrantes de la familia. Por ello, es importante consultarlo en conjunto para evitar el abandono de la mascota.

“Debido a múltiples creencias sobre el riesgo de las mascotas en los niños con asma, se considera desde el primer momento no tener un perro o gato, pero si ya se tiene, se piensa en echarlo a la calle”, señala la Dra. Ramírez.

Lo más importante es que el niño se sienta a gusto y estable con su enfermedad al convivir con su perrito, por ello es recomendable tomar en cuenta lo siguiente para evitar alguna crisis:

· Si en casa se tiene un perro de pelo largo, se deben tomar las medidas de higiene adecuadas porque se cree que es el principal problema de alergia, sin embargo, no es propiamente el pelo, sino el polvo o la caspa.

· Evitar que el pequeño se acerque o limpie la caja de los excrementos. Otro miembro de la familia puede hacerse cargo y así todos participan en el cuidado de la mascota.

· Pedirle a un integrante de la familia realizar el baño de la mascota, para evitar que el niño tenga contacto con un ambiente húmedo o frío.

Finalmente, la Dra. Nelly Ramírez indicó que el médico pediatra o alergólogo será el más indicado en manejar el tratamiento del pequeño, de tal manera que lleve una vida lo mejor posible sin riesgo o temor a convivir con su mascota.